Varios periodistas, Mávila Huertas, Federico Salazar, Aldo Mariátegui, Rosa María Palacios y diarios como El Comercio y Perú 21 han señalado que no están contra el Metropolitano ni contra el alcalde pero la cobertura periodística ofrecida en la última semana induce a creer lo contrario.
Ningún medio, teniendo tantos y tan buenos periodistas, se esforzó por decirle a la ciudadanía, con exactitud y precisión, dónde y cómo ocurrió el accidente y qué lo causó. Responder algunas preguntas contribuiría a bien formar la opinión pública. ¿El chofer estaba ebrio?, ¿conducía a mucha velocidad?, ¿se pasó un semáforo en rojo?, ¿se durmió ?, ¿fallaron los frenos del bus?, ¿dónde estaba el joven?, ¿tenía audífonos mientras manejaba?, ¿avanzaba en sentido contrario?,¿qué dice la investigación policial?, ¿porqué se da poco espacio a la versión del municipio?
En su programa de Radio Capital, Rosa María Palacios dijo el martes que el chofer tenía 90 papeletas. Con esta información abrió El Comercio al día siguiente y fue destacada en primera página por otros medios y repetida en varias emisoras.
Era obvio que esta información era un intento por trasladar el foco de atención contra el proceso de selección de choferes y en última instancia, contra sus responsables : el municipio y el alcalde. Y en efecto, eso ocurrió. En los días siguientes, en blogs, tweets y llamadas a emisoras, la población criticaba al muncipio por haber seleccionado al chofer. El viernes, mis alumnos de periodismo señalaron que lo más grave fue la contratación del chofer. ¿Las papeletas causaron o explicaban el accidente?
Un día después, los medios informaron diciendo que a menos de 24 horas de atropellar a un ciclista, un bus del Metropolitano chocó contra una camioneta. No dijeron que la camioneta volteó hacia la izquierda en 'U' (maniobra prohibida) y que se puso frente al bus. Esto causó el accidente.
Este caso sirve para constatar que la influencia de los medios en la población es tan cierta, real y eficaz como que uno más uno son dos. En coberturas similares, qué fuentes se consulta y qué se difunde, hacen la diferencia entre informar y dirigir la opinión pública.